PRIMERAS SEÑALES

Notar que la relación no iba por un buen camino no fue fácil para mí, estaba muy segado por mis sentimientos hacia el que no me daba cuenta de ciertas cosas y actitudes que tomaba, pensaba que todo era muy normal, que me celaran era lindo hasta que supero los límites. El hacerme borrar mis redes sociales, el prohibirme salir con mis amigos y el no tomar mi celular cuando estaba con él, no estaba bien. 

 

Creo que no le pertenecemos a nadie, las personas no son objetos que puedes manipular a tu conveniencia, si estas con una persona en específico es por cómo es por lo que te aporta y por quererla, pero cambiarla por completo solo para que tú te sientas bien es un acto de crueldad. Abandonar mis sueños por una persona, entregarle todo mi ser fue el peor error que pude cometer. 

 

Y así comenzó, deje redes sociales, amigos y familia por él. La pandemia no ayudo de mucho pues salir o frecuentarme con más personas se volvió algo muy escaso, hizo que me quedara la mayor parte del tiempo con esta persona en lo que todo volvía a la normalidad y las pequeñas salidas que teníamos juntos se volvían muy estresantes y salir con el miedo de que algo ocurriera o arruinara la cita. 

 

Nuestras salidas a comer, el cine, al super mercado o solo a caminar eran una tragedia no recuerdo una salida en la que no hayamos peleado o me reclamara por algo que para él estaba mal. Si alguien me miraba a ver o si yo miraba a cualquier persona hacía que se enfureciera y comenzaban los reclamos. Porque me te ven, los conoces o si tenía algo con ellos eran palabras que salían de su boca y todo se iba al carajo en ese momento. Pasaba de ser una buena cita a la peor. 

 

Jamas olvidare esto que salió de su boca, “Odio que la gente te voltee a ver” me hizo sentir como un objeto que solo era de él, ahora ni siquiera podría salir por que la gente me miraba, que estupidez, Como no note que me estaban manipulando que me miraba como su objeto y que solo estaba para mi cuando él quería, mientras yo sufría por dentro y no decir nada porque creía que todo era correcto él estaba creando inseguridades en mi sin importarle el cómo me sentiría.